Guevara fue herido superficialmente en el cuello y cayó en una especie de sopor del que fue sacado por Juan Almeida Bosque, para reorganizar un grupo de ocho hombres en situación desesperada por el hambre, la sed y la persecución del ejército. Tres días después, cuando todavía trataban de organizarse, el grupo fue emboscado por el ejército en Alegría de Pío.